Hola papás, soy el Dr. Richard Claro de Pedianorte, y hoy quiero hablarles sobre una preocupación muy común en la consulta pediátrica: ¿por qué mi bebé llora mucho?
Hoy atendimos a María Isabel, una hermosa bebé que llegó acompañada de su mamá visiblemente preocupada. Su principal inquietud era que la niña lloraba constantemente y no parecía encontrar consuelo. Es normal que, como padres, este tipo de situaciones nos generen ansiedad, especialmente cuando sentimos que hemos hecho “todo” y aún así el llanto persiste.
Mi bebé llora mucho: calma primero, siempre
Una de las primeras recomendaciones que les comparto en consulta es recordar que los bebés, aunque pequeños, perciben nuestra energía emocional. Si actuamos con ansiedad, tensión o frustración, ellos también lo sienten.
Por eso, el primer paso siempre será mantener la calma. Cuando tú te sientes tranquila(o), tu bebé también puede comenzar a relajarse. El llanto, muchas veces, no es un signo de que algo está mal, sino de que necesita consuelo, contacto, tranquilidad o simplemente expresar una emoción.

Tu tranquilidad es su medicina
Durante la consulta con María Isabel, hablamos sobre cómo sostener a un bebé que llora en brazos no se trata solo de acunarlo físicamente, sino de acompañarlo emocionalmente. Si lo haces con serenidad, con amor y paciencia, tu bebé va a empezar a calmarse poco a poco. Lo importante es recordar que esto es una fase completamente normal.
“Cuando mamá o papá se estresan, ese estrés se transmite. Pero cuando actuamos con tranquilidad, esa calma también se contagia.” – Dr. Richard Claro
¿Cuándo consultar si mi bebé llora mucho?
Aunque el llanto frecuente puede ser normal, es importante prestar atención si viene acompañado de otros síntomas, como fiebre, cambios en el apetito, irritabilidad extrema o dificultad para dormir. En esos casos, siempre es recomendable realizar una valoración pediátrica para descartar causas físicas como cólicos, reflujo, infecciones, entre otros.
¿Qué dice la ciencia?
Las investigaciones coinciden en que el apego seguro y la contención emocional son claves para regular el llanto en los bebés. Estudios de neurodesarrollo infantil avalan que un entorno calmado y amoroso favorece el equilibrio emocional desde los primeros meses de vida.

Al final, el llanto también comunica
No lo veas como un enemigo, sino como una forma natural que tiene tu bebé para decirte algo. A veces es hambre, otras veces sueño, o simplemente la necesidad de estar cerca de ti. Y eso está bien.
En el caso de María Isabel, al final de la consulta ya estaba mucho más tranquila. Con solo ajustar un poco el entorno y la actitud de la mamá, pudimos ver un cambio notable.
Asesoría Pediatra especialista Neonatólogo
Dr. Richard Claro
Pediatra Neonatólogo en Cúcuta